Alto, elegante y esbelto,
sales de las aguas dormidas,
como queriendo en un suspiro alcanzar el cielo.
Sus enrejadas ventanas y sus almenas
con su torre puntiaguda que es un minarete.
No se sabe a ciencia cierta si es sacado
de los cuentos de aventuras de las mil y una noche
o, el suspiro de una sirena fantasiosa,
o quizás un ensueño de Neptuno enamorado,
con ilusiones no cumplidas en su calenturienta mente...
De cordilleras en el infinito cuajadas de rosas,
de tantos llantos olvidados, tantos versos y tantas prosas.
Él se quiere evadir hacia el espacio
del abrazo insaciable de las aguas...
Meciéndose coqueto en el agua su mirada;
le roba al cielo una estrella,
danzando como una diosa pagana;
derrama sobre el agua su esbelta sombra
causándole celos irracionales a Neptuno;
´sus latidos se derriten en el viento,
su belleza se desvanece en el aire
y de sus formas tiene envidia
encantadoras ninfas y sirenas...!!
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