Ese tajo del Algarin nevado,
que parece una silla de montar
con una piel de cordero en lo alto;
y sus correntías con sus ranchos.
***//***
Sobre la loza del Charcón,
la nieve echa raíces,
y el pastor aposenta su zapato de vidrio y muerde
con sus afilados dientes de lobo blanco;
el frío terciopelo de la tarde, lo engrandece.
***//***
Protegidas bajo el palio dorado del sol
viaja una parvada de grajillas hacia su atalaya
en la cima cálida de las grajas;
sus sombras son carbones negros liberados.
***//***
En el oscuro silencio del dolmen
quedan petrificados sobre el misterio del hielo;
y queda grabada su imagen
sobre el marmóreo he incrédulo cerebro del pastor.
***//***
Se doblega la tarde cediendo el tajo completo,
a la huellas insepultas de la noche;
el enemigo oculto es el viento aterrador
del levante y el zorro blanco estepario:
para el cordero, el pavo y la gallina.
***//***
Va afilando el cuchillo vidrioso de la luna
borrando lentamente el semblante alegre
del pastor, perdido en la maleza.
**************************
Reservado el derecho de autor.

No hay comentarios:
Publicar un comentario