que los sueños no son un privilegio de los humanos;
entre otros los peces sueñan con sus antepasados,
y si no que se lo pregunten
a este raro, pero bello ejemplar azulado.
Ellos sueñan hasta despiertos,
con sus inexpresivos ojos redondos,
en las chorreras, en la mar o en el lago;
¡¡Cuanto tiempo ya que no pueden nadar
sin tener que vadear una mancha de petróleo,
unos plásticos, una rueda de camión
o, unas redes olvidadas!!.
Los peces, entre otros del reino animal
jamás dejarán de soñar y se preguntan:
¿cuando llegará la cordura al cerebro de la humanidad?
Ellos sueñan inmóviles y con los ojos
muy abiertos, por lo que pueda pasar...
No como los humanos, que se retuercen
en sus lechos gritando incoherencias
y dando manotazos al aire, no sé de quien
o, de que se quieren librar:
¿Será que no tienen muy limpia la conciencia??.
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