Uno como tantos descorazonados relatos verídicos,
de niños de aquella España negra que nos toco vivir
a los niños españoles de la posguerra..
Eran tres hermanitos; cuyos nombres son ficticios.
***
Sigumberto, Ambrosio y Anacleto;
El protagonista de la historia fue Ambrosio que es el de en medio;
Rogad a Carda momo y a Benjuí,
Que el Can de la piedad a estos niños fatigados
he indefensos los proteja...
Al que se suerte de la mano protectora de sus padres
y llorando desconsolado llame a los amigos que lo protejan..
Al que huye despavorido del hambre y la miseria,
a los que huyen de una muerte sin piedad y segura,
"Madre muda" que los proteja;
Aquellos hijos de un Dios menor,
aquellos que con sus tiernos pies descalzos
hollaban las espinas de los campos,
los que no encontraban la tierra prometida
por los jardines de su amada Andalucía.
Ellos no estaban ni acá ni allá de lo que se cocía.
Sólo tenían desgarros, golpes, hilachas, ausencias..
En su alma tierna de niños.
Sus padres afligidos por las circunstancias,
solo tenían para ofrecerle su amor y unos pechos secos.
Aquí llegó la gotera que colmó el vaso..
Tenían una tía.. llamada "Frígida" sin hijos y con una
posición buena para los tiempos que corrían;
Vino un día a visitar a unos primos.. y Ambrosio estaba
jugando con ellos..¡¡Cual sería la sorpresa de este niño!!
Cuando vio que le repartía un puñado de caramelos a los primos
y a el no le dio ni el papel para olerlos.. ¡Aún hoy no
a podido perdonarle aquello.. ¡Dios no lo sé!!!.
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